«Nos sorprende que un gobierno del signo del extremeño lo apoye», valora Ecologistas en Acción, que alegará contra la concesión de esta figura protectora.
El Diario Oficial de Extremadura (DOE) publica en su edición de este lunes la resolución por la que se incoa expediente de declaración de Bien de Interés Cultural (BIC) a favor de la montería y la rehala en la comunidad, con carácter de Patrimonio Cultural Inmaterial. La Consejería de Cultura, Turismo y Deportes de la Junta inicia este expediente a partir de la propuesta de impulso aprobada por la Asamblea de Extremadura, que insta al Ejecutivo regional a que se declaren estas modalidades cinegéticas como BIC en la comunidad autónoma.
El expediente administrativo que se inicia incluye diversos informes aportados por la Federación Extremeña de Caza sobre aspectos históricos, normativos, sociales y territoriales de la montería y la rehala en la región, señala la Junta, que de esta manera inicia el proceso que previsiblemente terminará declarando BIC a la montehería y la rehala. «No tiene sentido que la Junta inicie un expediente como este si no es porque tiene la intención clara de aprobar la declaración», apunta el abogado Ángel García Calle, coordinador de Ecologistas en Acción en Extremadura, que además anuncia que su asociación presentará alegaciones contra la concesión de esta figura protectora.
«No entendemos que algo que es absolutamente anacrónico se vaya a declarar BIC«, opina García Calle, que se muestra »sorprendido porque un gobierno del signo del extremeño apoye algo así«. »Que se haya aprobado en Andalucía, donde gobierna la derecha, no nos sorprende, pero no nos esperábamos que la Junta de Extremadura fuera a hacer lo mismo«. »Estamos en contra de esta declaración porque con toda seguridad implicará la concesión de subvenciones con las que no estamos de acuerdo«, argumenta el coordinador de Ecologistas en Acción, que añade otras dos razones. »En segundo lugar -explica-, se trata de unas prácticas que habitualmente se desarrollan en espacios protegidos, y que implican el corte de caminos y hasta de ríos o cañadas, como ya ha pasado, y la declaración de BIC haría que este tipo de restricciones en espacios naturales protegidos fueran más habituales de lo que ya lo son«. »Y en tercer lugar -concluy-, porque la mayoría de la cazadores que participan en estas actividades vienen de fuera de Extremadura y no suponen un beneficio para la región«. García Calle se pregunta »por qué no se declara BIC el senderismo, que es todavía más antiguo, o el pastoreo, que también es más antiguo y que ayuda a prevenir incendios forestales y a fijar población en el medio rural«.
La Federación Extremeña de Caza prefiere no valorar la resolución publicada hoy en el DOE, y emplaza al momento en que el expediente esté resuelto.
Fuente: hoy.es